Mirar sin Anteojos. Por Alejandra Morales
La Belleza de mirar sin anteojos
Una mirada desde el Enfoque Centrado en la Persona
"Cuando miro al otro como alguien que se está
convirtiendo en lo que es capaz de ser,
me abro a un proceso que libera a ambos."
-Carl Rogers
Mirar sin anteojos es un gesto profundamente humano. Es despojarse de todo lo que se interpone cuando nos encontramos con el otro. Es dejar de lado las ideas preconcebidas, las etiquetas, los juicios, las interpretaciones y mirar al otro de Ser a Ser, de Alma a Alma.
"Lo esencial es invisible a los ojos"
Antoine de Saint-Exupéry
En mi experiencia, algo pasa cuando miramos sin anteojos. No hablo de tener una visión perfecta o una nitidez precisa, sino más bien de mirar sin filtros y sin prejuicios así no me alejo de la persona que tengo frente a mi. Por lo general usamos anteojos para protegernos del Sol o de la Luz de la pantalla de la computadora porque nos afectan. También usamos anteojos para protegernos del juicio valorativo del otro, de las expectativas, de la opinión de un otro que me mira y me cataloga. Cuando logro sacarme esos anteojos algo transformador ocurre en mi y en el otro. El otro se siente visto, validado y cercano y yo me siento igual.
Cada día siento más que "Mirar sin anteojos" es una forma de presencia que no solo puedo aplicar en un encuentro de counseling, sino también en mis vínculos personales. Es permitirme ver lo que es, no lo que espero.
Muchas veces los anteojos emocionales que llevamos puestos por años
(el miedo, la desconfianza, el dolor, la decepción) distorsionan nuestra mirada y nos limitan. Nos hacen ver amenazas donde no las hay. Nos hacen ver frialdad en el otro donde quizás hay timidez. Nos hacen ver rechazo donde quizás hay limites sanos.
Mirar sin anteojos es, para mi, mirar con el corazón. Es aceptar al otro con sus luces y sombras. Es un mirar que me abre al encuentro conmigo mismo y con el otro; que cuando lo puedo hacer, me gratifica, me llena de vida y contribuye al sentido de vida que deseo seguir construyendo.
Creo que en la belleza de mirar sin anteojos, nos abrimos a la experiencia de conectarnos de persona a persona, sin juicios, sin historia. Y es un gran acto de valentía humana. Es una manera de desarmarnos también nosotros porque no tenemos que estar atrás de un rol o de un deber ser. Y por ende, nos volvemos más auténticos, libres y genuinos.
En mi no ha sido fácil incorporar este concepto del ECP en mi vida diaria. Muchas veces siento que, desde el Rol de Counselor, es más fácil porque entro en un Rol Profesional en el que nos entrenamos para desarrollar en nosotros la empatía, la aceptación positiva incondicional y la congruencia.
Hoy el gran desafío es poder ser una persona que en mi vida diaria pueda sacarme los anteojos al estar con otras personas más allá del Rol, de Humano a Humano.
Y... ¿Cómo es para ustedes?.....
interesante propuesta de introspección sobre como nos relacionamos. Gracias
ResponderEliminarA vos.
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